Estructuras de plástico

Abstract

Uno de los mayores avances, sino el mayor, dentro del campo de la arquitectura estructural debe ser en primer lugar el cálculo científico en sí, la implementación de las matemáticas y la física a la arquitectura. Con ello aprendimos a mejorar nuestra forma de construir, de entender por qué las construcciones no se caían y a confirmar la validez de aquellos diseños estructurales que ya dábamos como adecuados. Tras este cambio de paradigma, de lo empírico a lo analítico, cada avance en las estructuras venía dado por el material con el que se construían. Pero no únicamente la materialidad per se aumentaba el grado de conocimiento, más bien cada materialidad exigía paralelamente desarrollar un diseño estructural que adaptara sus propiedades. Ha ocurrido con la piedra, el acero, el vidrio, la tela y el hormigón. Cada uno de ellos ha significado un antes y un después en la arquitectura y la forma de construir. Hoy en día se siguen descubriendo nuevos materiales que estamos pudiendo implementar en nuestros diseños y no se vaticina que esto vaya a acabar aquí. Pero en el caso que nos ocupa vamos a hablar de los plásticos, que pese a haber representado un cambio en la producción y la industria de todo el mundo, no se implementó en la arquitectura como para llegar a destacar. Es uno de los grandes olvidados del siglo pasado que prometía mucho pero que a los arquitectos no les despertó el suficiente interés como para considerarlo una herramienta. A día de hoy se conoce muy bien cuáles son las cualidades básicas del plástico y sus derivados; ello nos ha dado una mayor consciencia y ha repercutido peyorativamente en la percepción que tenemos de él. Si en su momento no se valoró como material estructural, ahora no es posible concebir su validación para nuevos campos dentro de la industria. Podría parecer ir en contra de los principios eco-sostenibles que tanto han arraigado en la conciencia colectiva pero cabe contextualizar: si no hay nada que deba ser más duradero que un edificio (o su estructura mismamente), ¿no debería estar constituido por materia que perdure toda su vida útil? Más allá de estas cuestiones, sí hemos podido ver pinceladas de lo que este material puede ofrecer en la arquitectura; incluso tuvo su propio movimiento a medias tintas impulsado por arquitectos finlandeses de la época de los 60s. Se destacará “La Casa del Futuro” de Matti Suuronen, un concepto que era el principal motor para la construcción con elementos plásticos y que culminó con varios diseños; entre ellos el Venturo. Por otra parte, en su mayoría este material se sigue utilizando para crear arquitecturas efímeras y funcionalmente limitadas. Estos diseños serán objeto de estudio en el presente trabajo y se usarán, en cuyo caso, para ejemplificar la forma en que se pueden conseguir resultados estructurales pragmáticos. Para abordar el trabajo, primeramente se procederá a la descripción de la concepción de los plásticos: sus características, particularidades y propiedades, a partir de las cuales se pueden establecer las ventajas y desventajas sobre el uso de susodicho material. Casi se tratará de un ensayo físico donde para contextualizar los datos se compararán con las propiedades de los materiales más comunes en la construcción. Cabe mencionar que existen diversos tipos de plásticos por que para cada variedad se le podrá adjudicar una estrategia de diseño estructural diferente; ello nos llevará al siguiente apartado del trabajo. Llegados aquí ya tendremos un punto de partida para introducirnos en el ámbito arquiestructural, donde será vital aprovechar las cualidades idóneas para que los elementos plásticos sean portantes y aptos para el servicio. Con la ayuda de los ejemplos, comentados anteriormente, seguiremos profundizando en la aplicación del plástico a la arquitectura. Cada obra o grupo de obras contará consigo con una tipología estructural diferenciada, en la que dependiendo de la forma en que el plástico esté rigidizado, conformará o conformarán una categoría; pudiéndose categorizar hasta cuatro tipologías según el método de rigidización. Estas son: Tras hablar de las carencias que puedan padecer estas estructuras y de qué forma se pueden solucionar, finalmente se ahondará en una solución constructiva propia. Nos declinaremos por una tipología estructural dentro de las cuatro categorías analizadas, e implementaremos un programa concreto. La finalidad de este apartado es hacer las veces de conclusión, dejando como entendido los conceptos a partir de los que se ha hecho el estudio y aportando nuevas soluciones. Como último matiz antes de empezar con el análisis del material hay que aclarar que la intención de este trabajo no es validar el uso de plásticos en la arquitectura; más bien pretende hacer evidentes las cualidades que tuvieran en una estructura.