La prueba electrónica en el proceso civil

Abstract

La finalidad de este trabajo es analizar de formar estructurada el régimen jurídico que actualmente existe para presentar como pruebas el contenido de los medios electrónicos, tanto en la legislación y jurisprudencia nacional (centrándonos en la civil), como la normativa de otros países de manera global, respondiendo a una serie de interrogantes que nos surgen en estos casos, empezando desde los principios básicos del acceso de la prueba al proceso, en la que diferenciamos los conceptos tan relevantes de fuentes y medios de prueba, debido a la gran confusión que ha existido en la doctrina y jurisprudencia, hasta centrarnos propiamente en el tema fundamental de nuestro trabajo, esto es, la prueba electrónica. Desmembraremos en primer lugar buscando una definición adecuada para darle al concepto de prueba electrónica. Una vez definido, analizamos las diferentes modalidades de documentos electrónicos que consideramos que hay (públicos y privados) junto al desarrollo de los caracteres que encontramos. A continuación, nos metemos de lleno en la práctica que vivimos hoy en día, exponiendo una lista abierta de los medios probatorios electrónicos más utilizados, comenzando desde los que más fuerza probatoria tienen, estos son, los que contienen presunciones de veracidad gracias a la utilización de diferentes instrumentos, como pueden ser los cotejados por funcionarios públicos -en nuestro caso, las actas notariales, los cotejos del LAJ y el reconocimiento judicial- o los comprobados por terceros u otros instrumentos (peritos, firma electrónica, servicios de confianza, terceros de confianza, sellos de tiempo electrónico y notificaciones electrónicas certificadas). Seguidamente, pasaremos al lado, opuesto, es decir, a simples documentos privados y electrónicos, que se acompañan sin otros que complementen su veracidad. Como ejemplo, ponemos los siguientes: por un lado, los consistentes en capturas de pantalla o impresiones de correos electrónicos, WhatsApp (o aplicaciones similares), redes sociales y sus respectivas páginas web y los SMS y MMS; por otro lado, las reproducciones y transcripciones de archivos multimedia (audios, video y fotos). Expuestos los medios, hay que hablar de la forma y momento de aportación y de los requisitos de admisibilidad de tales medios de prueba (límites, pertinencia, idoneidad, legalidad, garantías), comparando los sistemas legislativos de otros países respecto de la prueba electrónica, para terminar con la impugnación de los medios probatorios digitales y la valoración del juzgador. Finalizamos el trabajo con unas conclusiones de la actualidad y problemática que existe en torno a la legislación, cómo se solventa con la jurisprudencia y los constantes cambios que vive el mundo de las TIC por la necesidad (casi adicción) que tiene nuestra sociedad de utilizarlas debida a su globalización y, por lo tanto, fácil acceso.