El desafío de la COVID 19 en Alicante. Efectos en la salud y resistencia ciudadana durante el confinamiento

Abstract

La ciudadanía de la provincia de Alicante como la del resto de España y el mundo está enfrentándose a un reto social y sanitario de enorme magnitud, donde todos y todas tenemos responsabilidad. Cuando comenzamos la presente investigación estábamos en los días del confinamiento por la primera ola de la epidemia de la COVID 19. Ya entonces pensamos que no podían descartarse más ondas epidémicas que obligaran a utilizar confinamientos y cuarentenas parciales en España; por lo que estudiar qué pasa en las vidas de las personas durante estos períodos para intentar minimizar sus efectos secundarios adquirió una importancia capital. El Grupo de Investigación en Salud Pública de la Universidad de Alicante realizó durante 40 días del periodo de confinamiento domiciliario (del 15 de marzo al 21 de junio) un estudio con el fin de valorar, con la respuesta de los y las ciudadanos(as) a un total de 63 preguntas, el estado de salud, el cumplimiento de las normas de confinamiento y las medidas atención sanitaria y de salud pública en la población de la provincia de Alicante. Para ello, contamos con el apoyo de la Sede Universitaria ciudad de Alicante, así como del resto de sedes de la provincia y del Centro de envejecimiento, Mayores Salud, de la Universidad de Alicante. A sus respuestas se sumaron las de un grupo de participantes que recibían los servicios telemáticos de enfermería del área sanitaria zona norte-Hospital General Universitario de Alicante (HGUA). Describimos los resultados del análisis de la encuesta en la que han participado 1.378 personas que dieron su consentimiento informado para usar sus respuestas de forma anónima. Aproximadamente, un 12% de participantes ha enfermado, algo más del 2% de la COVID 19. Analizamos los resultados de las principales dimensiones, que han sido: edad, sexo, ser igual o mayor a 60 años y vivir solo o en compañía, y lugar de residencia durante el confinamiento. Su experiencia es valiosa, pues la atención sanitaria y sus vidas se han visto modificadas. De este análisis extraemos 18 conclusiones y 15 recomendaciones para el diseño de políticas públicas y para la planificación sanitaria. Incluso, se hacen visibles nichos de mercado para que la empresa privada cubra las necesidades que no han sido cubiertas por la población. También se han identificado espacios a atender por las instituciones públicas. Por último, queremos poner el foco de atención en la idea de que es absolutamente clave incrementar la participación comunitaria, la de los ayuntamientos y los barrios para afrontar los brotes de la pandemia, pues hasta ahora la toma de decisiones se ha hecho sobre todo en el nivel nacional y de las comunidades autónomas.