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Sabemos.

En la parte de teoría hemos visto que, desde que en la década de los 80 se instalaron y desarrollaron en España las Grandes Superficies, el Merchandising se ha revelado como una potente herramienta de gestión del punto de venta. Hasta ahora, su ámbito de aplicación se ha limitado prácticamente a aquellos centros en los que se esperaba una gran afluencia de clientes y a las grandes marcas de lujo y prestigio.

Por su parte, los pequeños comercios, con independencia de su antigüedad, han ido incorporando algunas de las técnicas utilizadas por los anteriores, pero de una manera parcial y limitada y en momentos puntuales como las fiestas Navideñas o de San Valentín. Hasta ahora, lo único que los responsables de estos comercios han considerado atractivo del Merchandising ha sido la presentación de los productos en las estanterías y escaparates.